Creerías si te dijéramos que eBay, Airbnb o BlaBlaCar y tu reputación en redes sociales como Twitter, Facebook o Linkedin pueden ayudarte a adquirir un alquiler en España.
Ya se ha impartido como sistema en otros países, pero ha llegado a España y no tiene intención de parar. El sector inmobiliario se está innovando y éste es uno de los cambios que más llama la atención.
En la actualidad los inquilinos son rechazados en su mayoría porque su historial de solvencia no es su mejor carta de presentación, y muchas veces un mínimo error en el pasado se va acumulando en el tiempo sin posibilidad de regularizar.
Es por ello, que algunas firmas están dispuestas a ayudar a los inquilinos, sobre todo jóvenes profesionales, extranjeros o estudiantes a que por medio de este sistema, sean considerados “aptos” para alquilar un inmueble.
Se trata de que compañías de seguro puedan incluir en el seguro de impagos, la reputación online como perfil del inquilino, usando el scoring social de Traity, una startup madrileña que analiza la reputación de los usuarios de las webs de economías colaborativas.
Un sistema que está recién empezando y que por lo mismo no han habido muchos contratos debido a esta iniciativa, pero se espera una tendencia de crecimiento no solo en España, sino también a nivel global, dada la importancia que han logrado las redes sociales en la vida de cada individuo.
¿Los líderes confían en este sistema de scoring social?
Algunos de ellos dudan de la efectividad de las redes sociales para poder confiar una propiedad al mejor inquilino. En España el sistema para prevenir la morosidad de los los productos o servicios se ciñen al perfil financiero, una herramienta que consideran esencial para tratar de prevenir futuros malos ratos de cobranza.
El hecho de que los inquilinos han aumentado un 20% en España, eso va directamente relacionado con un aumento de impagos en un 8,5% según el FIM.
El tema de fondo está en confiar en este tipo de sistemas, ya que al igual que los ataques cibernéticos y hackers, las redes sociales también pueden ser hackeadas o modificadas para poder beneficiar este tipo de acciones.