Lo primero que se estudia en una Herencia es quienes son los Herederos. Se une a la situación dolorosa de la pérdida, las gestiones administrativas para transmitir los bienes, las obligaciones y los derechos a otras personas que forman parte de esa herencia. Es importante saber si existe o no testamento y si existe una Declaración de Herederos por el que se determina quienes son las personas llamados a heredar. Hay que recordar que si aceptamos una herencia no sólo aceptamos los bienes de la persona fallecida sino que también asumimos el pago de sus deudas.
Heredar un piso o en general aceptar una herencia, nos puede afectar negativamente en el ámbito económico y lejos de suponer una ganancia provocar enormes pérdidas, ya que el valor de la herencia, en algunos casos, puede ser inferior al coste de los impuestos y otros gastos que supone la aceptación de la herencia, si además existe alguna carga sobre el inmueble heredado (una hipoteca por ejemplo) la pérdida puede ser mayor y suponer el endeudamiento de nuestra familia.
Para evitar estas situaciones existe lo que se conoce como aceptación de la herencia “a beneficio de inventario” que consiste en que el heredero se reserva la posibilidad de renunciar a la herencia si el importe de las deudas es superior al valor de dicha herencia.
También es importante saber que para que se produzca la aceptación de la herencia no hace falta otorgar escritura pública o presentar un escrito, bastando la aceptación tácita de la herencia, es decir mediante actos o hechos que manifiesten nuestra voluntad de aceptar la herencia por lo que debemos extremar las precauciones antes de realizar ningún acto que pueda hacernos acarrear con las deudas del fallecido.
Cuando se hereda un piso, tenemos que tener en cuenta obligaciones fiscales, puesto que es una operación gravada con numerosos impuestos, entre ellos la plusvalía (que se produce cuando existe algún inmueble urbano) y que corresponde a cada Ayuntamiento ó el impuesto de sucesiones que no es igual en Madrid que en Castilla León, es decir, que tiene diferentes tipos impositivos, bonificaciones, deducciones, según la Comunidad Autónoma de que se trate, se pagará una cantidad de dinero diferente dependiendo del lugar de residencia del fallecido. Tampoco hay que olvidar los gastos inherentes que supone aceptar la herencia como puede ser la comunidad de vecinos, pagos de facturas, mantenimiento, pago de inmuebles (IBI) que grava a los bienes inmuebles, ya sea urbano o rural. Además, en caso de vender algún inmueble heredado debemos tributar por el IRPF (Impuesto sobre la renta de las Personas Físicas) por la ganancia patrimonial que hayamos obtenido, por ello tenemos que tener en cuenta la asesoría jurídica o un despacho de abogados, por si surgen mayores problemas a la hora de repartir los bienes de una herencia y para planificar adecuadamente los impuestos que pueden recaer sobre la operación.
Otra de las cuestiones que se nos plantea en el día a día a la hora de heredar un piso -u otros bienes del causante-, es la de la legítima que es la parte de la herencia que obligatoriamente se reserva por Ley a los herederos forzosos o legitimarios que tienen derecho a heredar aunque el fallecido no haya querido nombrarlos herederos.
Puede suceder que una persona haya muerto sin testamento, en este caso, los trámites son más caros y largos que en el caso de existir testamento por lo que es muy recomendable hacerlo. El precio para hacer un testamento varía según ciudades siendo por ejemplo capitales como Madrid unos 50 € y nos evitará costes futuros y numerosos problemas a los herederos.
En todo caso, si la persona ha fallecido sin testamento no lo demos todo por perdido pues hay soluciones para repartir la herencia, se trata de la declaración de herederos abintestato (o herencia sin testamento), que puede tramitarse bien por abintestato notarial, o bien por abintestato judicial. Estos supuestos son más complejos por lo que es recomendable acudir a un profesional.
Una recomendación importante es contratar a abogados expertos en herencias y en derecho inmobiliario, ya que es una rama muy especializada dentro del derecho, conocer la ley, y los detalles de cada comunidad autónoma hace que nos podamos ahorrar mucho dinero, asique lo mejor es confiar en abogados expertos en derecho inmobiliario, despachos como Solventium Abogados que llevan más de 25 años gestionando inmuebles, y herencias como capital principal la herencia de un piso y activos inmobiliarios.